¿Cuál es cuál? Así es como puedes diferenciar entre un chile poblano original y uno que no lo es

Todos conocemos el chile poblano, ya sea gracias a los chiles rellenos, chiles en nogada o algún otro platillo delicioso preparado con este chile. Pero ¿sabes diferenciar entre un chile auténtico y uno que es “imitación? Por si no conoces estas diferencias, en este artículo te traemos los rasgos a los que debes prestar atención para darte cuenta si estás consumiendo un chile auténtico o te has encontrado con una imitación. Pasemos a contarte los detalles de estas diferencias.

Se cree que el chile poblano tiene su origen en el Valle de Tehuacán, Puebla (de ahí su nombre), debido a que existe evidencia de que su cultivo se inició en esta zona de México, de acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural. Esta especie de chile es un fruto grande, a comparación de otras variedades y no suele ser picante, apenas alcanzando los 1.000- 2.000 en la escala de Scoville, que es la unidad que mide el picor de estos alimentos. En México, este chile es sumamente apreciado en todo el territorio, ya que es muy utilizado en una gran diversidad de platillos populares dentro de la gastronomía de nuestro país, como los chiles rellenos, en nogada o hasta en la preparación del tradicional mole.

Diferenciar un chile poblano auténtico de uno ´pirata’ puede ser un poco complicado, sobre todo, si no estás muy familiarizado con estas diferencias. Pero no te preocupes, aquí te daremos algunos consejos que te pueden ayudar a la hora de distinguir una variedad de otra.

Así es como puedes distinguir un chile poblano auténtico de un chile ‘pirata’

Créditos de imagen: Sequoia R F1
  • Forma y tamaño: el chile poblano auténtico posee una forma alargada y ligeramente curvada, como si se tratara de un cono. Puede alcanzar los 12 o 15 cm de largo y de 5 a 7 cm de anchura. Si encuentras un chile que tiene una forma irregular o es muy pequeño, podría ser que no se trate de un chile poblano auténtico.
  • Color: el chile poblano en su punto de maduración puede cambiar de ser verde oscuro a marrón. Si cuando está inmaduro no es de una tonalidad verde oscuro, probablemente sea un chile falso.
  • Textura y grosor de la piel: el chile poblano posee la piel lisa y brillante, al tacto, es firme pero no suave. Si al pasar la mano, notas que la piel es demasiado suave o arrugada, tiene demasiada o poca “carne”, es probable que no sea original.
  • Aroma: los chiles originales tienen un olor a tierra y ligeramente picante. Si no detectas algún olor o es diferente, podría ser falso.
  • Sabor: estos chiles se caracterizan por no ser tan picante, por lo que, si al probarlo notas que está desabrido o excesivamente picante, no es genuino.
  • Origen, proveedor y precio: si realizas tus compras en mercados locales, tienes mayor posibilidad de conseguir chiles que sean auténticos. Si te percatas de que estos tienen un precio sospechosamente accesible con respecto a otros proveedores, es muy probable que estés frente a chiles falsos.

Por ello, es muy importante que prestes atención a estos detalles para que puedas obtener ingredientes de calidad para tus comidas. Esperamos que este artículo sea de tu agrado y te ayude a diferenciar con mayor facilidad la próxima vez que hagas una compra de estos deliciosos chiles.

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