Arqueólogo creyó que era un diente, pero al analizarlo halló a un animal de la última Edad de Hielo
En el condado de Yazoo, Mississippi, un equipo de arqueólogos liderado por el ya renombrado paleontólogo Eddie Templeton, ha desenterrado un tesoro fósil que ha dejado al mundo científico boquiabierto. Al principio, Eddie no sabía que es lo que se había encontrado, de hecho a simple vista creyó que era un diente pero el, en su experiencia sabía que no era del todo fácil revelar un fósil así. Fue entonces cuando en laboratorio, se dieron cuenta que se trataba de un hueso fosilizado perteneciente al legendario felino diente de sable, una bestia que dominó los paisajes de la última Edad de Hielo hace más de 10.000 años.
El felino diente de sable, también conocido como Smilodon, era un depredador formidable, con colmillos que podían alcanzar hasta 30 centímetros de longitud. Esta criatura, que se asemejaba a un tigre gigante, era el terror de la fauna prehistórica, y su descubrimiento todavía nos suena interesante en un aspecto arqueológico.
Resulta que el hueso fosilizado encontrado en Mississippi ha sido identificado como parte del dedo del pie de uno de estos magníficos felinos. Aunque a simple vista pueda parecer un hallazgo modesto, su rareza es insuperable. En todo el mundo, solo se han descubierto unos pocos huesos fosilizados de felinos dientes de sable en posición, y el hecho de que este haya sido encontrado en Mississippi añade un nuevo nivel de sospecha al descubrimiento.
Lo más curioso de este hallazgo es la ubicación en la que se realizó. Mississippi, a pesar de no ser conocido por sus yacimientos paleontológicos, parece haber sido un hogar importante para varias especies de felinos durante la última Edad de Hielo. Este descubrimiento puede indicar que la región podría haber sido un refugio clave para estos gigantes depredadores en un momento en que el clima y el paisaje cambiaban rápidamente.
El equipo de arqueólogos ha estado trabajando para desenterrar más pistas sobre la vida de los felinos dientes de sable en esta región. Cada nuevo hallazgo habla todavía más de la historia natural de Mississippi y nos dice si realmente este “cementerio” de dientes de sable fue alguna vez el lugar de estas especies y la evolución y el comportamiento de estas criaturas prehistóricas así como el entorno lo obligaron a extinguirse.
El legado de los dientes de sablePrincipio del formulario
A lo largo de su estancia prehistórica, los dientes de sable se adaptaron a una variedad de hábitats, desde las praderas hasta los grandes bosques. Se cree que eran cazadores solitarios, expertos en acechar a sus presas en la maleza o emboscarlas desde la altura de los árboles.
Su dieta era diversa, abarcando desde mamíferos gigantes como mamuts y bisontes hasta presas más pequeñas como ciervos y caballos. Esta versatilidad alimenticia les permitió prosperar en una amplia gama de entornos y competir con otros depredadores de la época.
Hace unos 10,000 años, al final del Pleistoceno, estas bestias desaparecieron misteriosamente de la faz de la Tierra. Si bien la causa exacta de su extinción sigue siendo objeto de debate, se cree que cambios climáticos, competencia con otros depredadores y la caza excesiva de sus presas pueden haber contribuido a su desaparición.
