Remueve las manchas de suciedad en la pared con estos 4 trucos infalibles
No hay nada mejor que conservar las paredes del hogar impecables y luciendo como si estuvieran recién pintadas, pero la realidad es que este tipo de zonas en la estructura de la casa son fáciles de ensuciar y algunas difíciles de limpiar, por lo que se debe ser cuidadosos y seleccionar bien el método para remover estas manchas. A continuación, cuatro trucos que dejarán las paredes de tu hogar como nuevas.
1. Jabón para trastes
Un poco de jabón para trastes será suficiente para que las paredes queden totalmente blancas, además de ser una sustancia que todos tenemos en el hogar. Antes de aplicar deberás asegúrate de que no existan grumos en la pared para evitar empeorar el problema. Si es el caso, intenta frotar con un cepillo limpio y seco por la zona del grumo. Una vez que te asegures que no hay presencia de estas protuberancias, es momento de aplicar el jabón.
En un recipiente con agua tibia vierte una cantidad considerable de jabón para después aplicar por toda la pared con una esponja. Cuando lo hagas, procura no mojar mucho la pared, ya que podría resultar contraproducente y crear una mancha de agua. Una vez aplicado el jabón deja reposar durante cinco minutos y retira con un poco de agua y una esponja suave. Cuando se seque verás que la pared quedó totalmente blanca y sin ningún tipo de mancha.
2. Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es un limpiado perfecto que dejará las paredes relucientes y totalmente blancas. Para esto deberás tomar un paño limpio y húmedo, después con una pasta hecha de bicarbonato de sodio y agua, llena el trapo para pasarlo por las zonas manchadas de la pared. Al igual que con el jabón deja reposar por 5 minutos para después retirar, limpiar y secar muy bien. Para crear la pasta deberás mezclar 3 partes de bicarbonato por una de agua, revolver muy bien, y aplicar con una esponja que esté húmeda.
3. Suavizante para ropa
Probablemente desconocías que el suavizante para la ropa también es un gran limpiador de manchas en las paredes. Este es perfecto ya que remueve la suciedad y deja un exquisito aroma sin dañar la pintura de la pared gracias a su suave fórmula. Remoja un paño limpio en el suavizante de tu preferencia, después aplica por toda la pared para remover muy bien las manchas y la mugre, retira con un poco de agua y seca muy bien. Tus paredes quedarán blancas y con tu aroma favorito. Perfecto para las paredes blancas, aunque si la mancha es mucho más penetrante, es mejor utilizar alguno de los métodos anteriores, como el jabón de lavavajillas o el bicarbonato de sodio.
4. Vinagre blanco
Es bien sabido que el vinagre es una excelente opción para blanqueamiento y para cualquier tarea de limpieza dentro del hogar. Esta sustancia será útil especialmente cuando la mancha es grasosa o dura. Para esto deberás llenar un balde de agua tibia para verter una taza de vinagre blanco, después aplica por toda la pared como en los pasos anteriores. Cuando retires y seques muy bien la pared estará lista y lucirá como nueva.
