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Cereales: ¿Son buenos o malos para los perros?

Cuando hablamos de mascotas, lo primero en lo que muchas personas piensan es el mejor y más fiel amigo del humano, los perros. Una especie animal por de más conocida por todo el mundo, el cual se suele adoptar para tener una relación humano-mascota.

Después de miles de años de evolución y selección natural y artificial, los lobos salvajes fueron domesticados y convertidos en los perros de casa que conocemos hoy en día, la variedad de características entre razas como tamaños, pelajes, colores, personalidad, nariz, orejas, hocico, patas, entre muchas otras, fueron obra del ser humanos al ir modificando artificialmente la biología de algunos perros a través del tiempo, según información de National Geographic.

Sin embargo, algo que no cambio mucho fue la alimentación de estos animales, pues estudios revelan que desde que se empezó a domesticar a los perros, ellos ya contaban con una dieta muy similar a las de los humanos, y solo fueron agregando otras cosas desarrollando el organismo para aprender procesar más comida.

Ahora bien, los perros actuales cuentan con una amplia información sobre su anatomía y la forma en que su organismo funciona, expertos especializados en estas especies animales, medicinas, entre más cosas. Por ende, tener un perro por mascota no es cualquier cosa, puesto que se tienen ciertas responsabilidades que cumplir, entre ellas cuidar de su salud y cuidar de su dieta, ya que, ambas suelen están ligadas en gran medida.

En los últimos años, ha surgido un debate muy acalorado por el consumo de cereales por parte de perros, los cuales suelen encontrarse en el alimento seco para perros o croquetas. Muchos de los amantes caninos afirman que el uso de cereales en la alimentación diaria de los perros, pues se dice que este ingrediente puede causar en el perro gases, diabetes, diarrea, hinchazón, entre otros problemas de salud.

Esta noticia no pasó desapercibida por las grandes empresas de alimento para perro, quienes decidieron sacar de sus productos secos a los cereales como ingrediente.

Crédito de imagen: Ambas Manos

Antes de seguir avanzando, aclaremos que un cereal se clasifica como una planta de hierbas, la cual es considerada nutriente gracias a sus granos, unos ejemplos son el arroz, el trigo, el maíz, entre mucho otros. También debemos consideras que las semillas o granos suelen contener cantidades considerables de almidón.

Los problemas con los cereales, según la creencia popular, han sido desmentidos por la ciencia:

  • No es parte de la dieta del perro

A diferencia de lo que las personas creen, la dieta de los perros ha sido muy variada desde los comienzos de la convivencia de humano-perro. Existe un artículo publicado en Springer Link, en donde se habla de la dieta de los perros durante la edad de bronce y la edad de hierro, teniendo resultados sorprendentes, en donde se encontraban restos de plantas, frutas y vegetales en los desechos de los animales, entre ellos incluidos los cereales.

  • Los perros no digieren el almidón

Este es otro pronóstico equivocado para muchos amantes de los perros, pues la ciencia desmiente totalmente que los perros no pueden digerir el almidón. Artículos científicos publicados en la National Library of Medicine de Estados Unidos, nos dicen que los perros cuentan con <<alfa-amilasa salival>>, una encima capaz de descomponer el almidón, así como la capacidad para digerir el almidón que se encuentra en los cereales.

  • El gluten les hace daño a los perros

La National Library of Medicine nos informa a través de un artículo que la relación de los perros con el gluten aún es estudiada, pero, que no se ha visto ninguna reacción dañina, más que en ciertas subespecies muy específicas de los perros, entonces, se puede decir que el gluten de los cereales puede no ser dañino, dependiendo de la raza del perro.

  • Microtoxinas

Esta creencia tiene un poco más de fundamento, ya que las microtoxinas son hongos microscópicos capaces de desarrollarse en algunos vegetales, así como en semillas y granos, suele suceder cuando el alimento seco está guardado.

Sin embargo, en la actualidad el cuidado de los granos, semillas y cualquier cereal, es sumamente riguroso, además de pasar por procesos de desintoxicación, y los métodos de almacenaje son, por mucho, más óptimos hoy en día. Tomando en cuenta todo eso, es muy raro que estas microtoxinas puedan proliferar en los alimentos para perro.

No solo los cereales no son malos para los perros, sino que, incluso cuando no son necesarios para su dieta, suelen ser buenos en momentos cruciales para esta especie, tales como durante un embarazo y la lactancia.

Se debe considerar que todos los perros son diferentes y cada organismo es un mundo, antes de comenzar a darle alimentos desconocidos para tus mascotas, consulta a un experto para una evaluación más certera.

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