Científicos captan desconcertantes y misteriosos estruendos en la estratosfera de la Tierra
Un equipo de investigadores detectó extraños sonidos provenientes de la estratosfera de la Tierra, al lanzar unos globos con sensores de infrasonido, captando una serie de ruidos de origen inexplicable.
Como parte de una investigación, los científicos lanzaron globos solares gigantes a 21.336 metros de altura para grabar sonidos de la estratosfera de la Tierra y, para su sorpresa, los sensores de infrasonido detectaron unos extraños ruidos.
El equipo de investigadores de los Laboratorios Nacionales Sandía de Nuevo México, liderado por Daniel Bowman, hizo uso de nuevas tecnologías y se aventuró a explorar la estratosfera terrestre, encontrando una serie de sonidos grabados que, hasta el momento no tienen una explicación.
De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), la estratosfera es «una de las capas de la atmósfera terrestre; está conformada por la troposfera y la mesosfera, tiene 35 kilómetros de espesor y es la zona donde se sitúa la capa de ozono».
Bowman y su equipo habían montado una serie de cámaras en los globos meteorológicos «para fotografiar el cielo negro de arriba y la Tierra de abajo», construyendo su propio globo solar para este fin. Sin embargo, el propósito inicial dio un giro cuando Bowman decidió añadir grabadoras de infrasonidos para detectar el sonido emitido por los volcanes, según lo reporta The Washington Post.
Bowman y su asesor Jonathan Lees, de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill «se dieron cuenta de que nadie había intentado poner micrófonos en globos estratosféricos en medio siglo, así que pasamos a explorar qué podía hacer esta nueva plataforma», explicó el director de la investigación.
Los extraños sonidos captados por el globo fueron compartidos en la Reunión número 184 de la Acoustical Society of America, en Chicago y, aunque en dicho audio se pueden apreciar ruidos provenientes de nuestro planeta, también se detectan crujidos y susurros que no tienen una explicación directa.
Dentro de los sonidos que se pudieron detectar se encuentran truenos, colisiones de olas oceánicas, aviones de hélice, sonidos de la ciudad, lanzamientos de cohetes suborbitales, terremotos, incluso trenes de carga, sin embargo, los crujidos tienen un origen inexplicable.
«En la estratosfera hemos encontrado señales de infrasonidos que han sido registradas con una frecuencia de unas cuantas veces por hora en algunos vuelos, pero la fuente de estos sonidos es completamente desconocida», expresa Bowman.
Las ondas acústicas detectadas tienen una frecuencia inferior al espectro audible del oído humano, es decir, que están debajo de la escala de los 20 Hz.
De acuerdo con el investigador del estudio, definió sus globos sonda como «bolsas de plástico gigantes con un poco de polvo de carbón en el interior para oscurecerlas». El funcionamiento de estos globos es básico; cuando el sol brilla sobre los globos oscuros, el aire generado en su interior se calienta y genera que los globos floten.
Con este principio, Bowman logró elevar sus globos a una sorprendente altura de más de 20.000 metros, algo impresionante teniendo en cuenta que cada uno de estos ‘dispositivos’ podía llegar a costar 50 dólares.

Por ahora, el equipo compartió que seguirán investigando la procedencia de estos extraños ruidos de la estratosfera y por qué algunos vuelos los detectan y otros no.