Mantén tus ventanas limpias durante las lluvias: 4 trucos infalibles

Después de una refrescante lluvia es común notar el cómo nuestros vidrios fueron manchados por las gotas de lluvia que impactaron en él. A causa de que en algunas zonas el agua tiene un alto contenido de minerales, como el calcio y el magnesio, pueden dejar manchas bien marcadas. Puede parecer que las gotas de lluvias son fáciles de quitar, pero con el paso del tiempo empiezas a creer que nunca desaparecerán. A continuación, 4 maneras que quitar el agua de lluvia de las ventanas y que no quede rastro de ellas.
1. Pasta de dientes
Aunque sea un tanto extraño, la pasta de dientes es perfecta para eliminar la marca de las gotas de lluvia. Lo único que necesitarás es pasta de dientes, bicarbonato de sodio, vinagre blanco, jabón líquido y poco de agua. El procedimiento es sencillo:
- Calienta una taza de agua y añade una cucharada de bicarbonato y otra de la pasta de dientes.
- A esa misma mezcla agrega media taza de vinagre blanco, después mezcla muy bien.
- Con un periódico o un trapo seco limpia la superficie de tu ventana para después limpiarla con la mezcla.
- Retira el exceso de la mezcla con un trapo.
2. Limón
El limón es una gran opción para limpiar las gotas de lluvia de las ventanas. Solo tienes que cortar un limón y frotar por toda la superficie, permite que el ácido de limón haga efecto por lo menos 5min. Limpia los excesos y verás como tus ventanas quedan como nuevas. El limón no dañará ni manchará tus ventanas, pruébalo y verás sus resultados inmediatos.
3. Vinagre
El vinagre es uno de los limpiadores caseros más eficientes. También será barato y eficaz para desmanchar a tus vidrios de las gotas de lluvia. Solamente necesitas:
- Mezclar agua y vinagre en algún recipiente
- Aplicarlo a la superficie de tu ventana
- Límpialo con un trapo (también puedes utilizar algún periódico).
El vinagre elimina la suciedad y aporta brillo y transparencia sin dejar marcas. Como truco, también puedes limpiar en un día nublado o lejos del Sol directo, ya que el calor del Sol hace que el limpiador se seque rápido, dejando marcas.
4. Agua y amoníaco para manchas difíciles
Si quieres una solución un poco más ruda, también puedes hacerlo con amoníaco y agua. La ventaja de este truco es que tus ventanas quedarán sin algún tipo de residuo. Asegúrate de estar preparado, se necesita el uso de protección para manipular esta sustancia. Esto es lo que recomienda el Centro Canadiense de Salud y Seguridad Ocupacional:
- Protección para los ojos/la cara: Use gafas de seguridad química. También puede ser necesario un protector facial (con gafas de seguridad).
- Protección de la piel: Use ropa de protección química, por ejemplo, guantes, delantales, botas. En algunas operaciones: use un traje de encapsulación de cuerpo completo de protección química y un aparato de respiración autónomo.
Pasos para limpiar los vidrios con amoniaco y agua, según las recomendaciones de Clanipedia:
- En un rociador agrega amoníaco y agua
- En un paño limpio rocía esta mezcla para después pasarla por la superficie de tus vidrios
- Con ayuda de un trapo limpio, quita los restos de la mezcla.
Verás que con este truco se logrará eliminar hasta las superficies más difíciles.