Enséñame de Ciencia
Curiosidades Científicas y más.MundoTecnología

¿Cuál es la letra del alfabeto que es conocida como la “hija” de la letra ‘I’? La RAE aclara la duda

Créditos de imagen: RAE

Todos los idiomas del mundo cuentan con un alfabeto, único y a veces muy diferente uno con el otro, pero eso es parte de la enorme diversidad de lenguas y formas de escribir que existen.

Como lenguas vivas o idiomas que evolucionaron en su momento, desarrollaron su forma de escritura propia, expresiones o alfabetos. No todos son iguales y las diferencias suelen ser notorias, volviéndose característicos del idioma que están representando.

Sin embargo, casi todos los alfabetos se desarrollaron a partir de otro, o ellos mismos fueron cambiando hasta llegar a ser como los conocemos ahora, pues en un principio no eran exactamente iguales e incluso puede ser que ni siquiera se parecieran al que estamos familiarizados en la actualidad.

Por ejemplo, el alfabeto que usamos en la actualidad no es el mismo que se utilizaba en un principio. El alfabeto latino tomó préstamos de los etruscos, quienes hablaban una lengua que no se ha podido descifrar completamente y quienes usaban un alfabeto basado en una variante occidental del alfabeto griego y que era distinta de la versión oriental, con la cual se escribía el griego clásico, esto de acuerdo con información de la Real Academia Española (RAE).

Y como parte de una evolución constante, hay una letra que ha tenido una interesante historia, ya que tiene una estrecha relación con una letra que en la actualidad forma parte de las vocales: se trata de la letra “J”.

Anteriormente, la letra J no era considerada como una letra independiente, y surgió en la época de la escritura latina, donde la “I” servía para representar tanto sonidos vocálicos como consonánticos. Y en manuscritos antiguos, era común encontrar la letra I escrita con un punto arriba.

Créditos de imagen: Pinterest | Aracelyasmine

Fue durante los siglos XVI y XVII que los sonidos vocálicos se empezaron a diferenciar de los consonánticos, siendo así que se especializó a la “I” y la “V” para que pudieran representar los sonidos vocales y de la “J” y la “U” para las consonantes.

Y de esta manera, fue que nació la letra “J”, teniendo identidad propia, y que pasó a formar parte del alfabeto, posicionándose enseguida de la letra I, pero no como una coincidencia, sino como un reflejo de su conexión arbitraria con la letra de la cual se originó.

Este tipo de cambios solo son una muestra de la enorme evolución que ha tenido el idioma español a lo largo de los años, por lo que no podemos negar que se trata de un idioma maravilloso que nunca dejará de sorprendernos.

Actualmente, la Real Academia Española sigue añadiendo nuevas palabras, como muestra de la constante evolución que tiene nuestro idioma. Y no solo se añaden nuevas palabras, sino que se incluyen nuevas acepciones, se rescatan significados y se vuelven a usar palabras que antes habían quedado olvidadas, lo que refleja que el idioma español es como un río que siempre está fluyendo.

Comparte ciencia, comparte conocimiento.

Descubre más desde Enséñame de Ciencia

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo