Rayos cósmicos: ¿Qué son y cómo afectan a las personas?
El universo es un gran mar de secretos y misterios, en nuestra corta existencia no hemos de comprender ni una porción minúscula de lo que esta gran masa de vacío esconde.
Si bien es cierto, el universo contiene en él mismo una cantidad casi infinita de cuerpos celestes, estrellas, agujeros negros, universos, entre muchas otras cosas conocidas y desconocidas, nuestro conocimiento y comprensión del mecanismo universal aún es en extremo limitado comparando con la cantidad inmensa de información que esconde el universo.
De vez en cuando, eventos cataclismos se originan, por azares físicos, químicos o por mera coincidencia de encuentro, los cuales terminan liberando cantidades de energía inimaginables, la cual se esparce por el espacio viajando incluso años luz desde su punto de origen.
En ocasiones, estas ondas de energía llegan a nuestro planeta Tierra en formas de <<rayos cósmicos>>, estos son descritos por el Organismo Internacional de Energía Atómica, también conocida por sus siglas en inglés como IAEA, <<los rayos cósmicos son partículas subatómicas con una energía extremadamente elevada, principalmente protones y núcleos atómicos acompañados de emisiones electromagnéticas que se desplazan por el espacio y acaban bombardeando la superficie terrestre>>, también se estima que estos rayos viajan a velocidades aproximadas a las de la luz, es decir, a una velocidad cercana a los 300,000 km/s.
Así mismo, se menciona que existen dos tipos de rayos cósmicos, los galácticos y los solares. Estos últimos, su origen, provienen de estrellas lo suficientemente grandes para emitir estas fuertes ondas de energía; en cuanto a los galácticos, por lo general, provienen de explosiones de estrellas que están en la última etapa de sus vidas, es decir, supernovas.
Lo sorprendente de estos rayos cósmicos es que su esencia aún es desconocida por la ciencia, pues en la actualidad solo hay dos casos en los que se tiene registro de esta energía cósmica.
En el año de 1991 se registró el primer y más potente rayo cósmico, del que se adquirieron ciertos datos, pero no los suficientes. Este rayo cósmico tuvo una descarga de energía cientos de veces más fuerte que la energía liberada en el acelerador de protones más potente creado por el humano, y fue nombrado como <<Oh-My-God>>. Información tomada de la página web Observatorio Pierre Auger.
El segundo rayo cósmico registrado cayó en Utah, Estados Unidos, el pasado 27 de mayo de 2021, este fue llamado <<amaterasu>>, este fue menos potente que el primer rayo registrado, pero aun así muy potente. Este evento fue estudiado por la Osaka Metropolitan University, bajo la dirección del científico Toshihiro Fujii.
De este segundo evento no se tiene mucha información acerca de su origen, ni de su naturaleza en general, pese a los muchos esfuerzos de la ciencia, aún se tiene muy limitado el conocimiento sobre los rayos cósmicos.
Desde el registro de este segundo rayo cósmico en 2021, hasta el pasado 24 de noviembre 2023, tiempo en que se estuvo en constante estudio, hasta su publicación en un artículo en la revista virtual Science.
La misma IAEA, menciona que en cuanto a radiación cósmica, la Tierra se protege gracias a sus polos y al campo magnético que lo rodea, llamada magnetosfera, de vez en vez los rayos cósmicos sí llegan hasta nosotros, pero sus consecuencias son nulas, aunque estas inmensas olas de energía siguen en estudios.
Aún se requieren muchos estudios para entender tal fenómeno tan misterioso, por lo pronto, los expertos siguen en constantes esfuerzos para revelar los secretos de los rayos cósmicos.