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El Telescopio Espacial James Webb capta cómo será la inevitable muerte del Sol

¡El telescopio espacial James Webb lo hizo de nuevo! Este maravilloso observatorio espacial de alta tecnología acaba de revelar datos impresionantes que han dejado a más de un estudioso del universo con la boca abierta.

Según nos revela la página oficial de la misma Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, o mejor conocido como NASA, desde el lanzamiento a órbita, en diciembre del 2021, el telescopio espacial James Webb ha logrado recabar datos increíbles que abren las puertas al futuro de como entendemos la astronomía y el universo en general.

Esta herramienta de alta tecnología nos ha regalado las mejores postales de la profundidad del universo con imágenes impresionantes tomadas por el mismo telescopio.

Pero, no menos importante, también ha sido autor de incontables datos que ha tenido la oportunidad de obtener y compartir con los expertos encargados del manejo del James Webb.

Recientemente, el telescopio espacial de la NASA, en trabajo conjunto con las agencias ESA, JAXA y la agencia espacial canadiense, han quedado atónitos por los datos que han recibido en la más reciente observación espacial.

Messier 57

Resulta que se ha observado una zona espacial con características muy interesantes para los astrónomos. Resulta que a unos 2.300 años luz de distancia de la tierra se encuentra una nebulosa, la cual, incluso, es visible desde nuestro cielo, siempre y cuando no haya contaminación de ningún tipo.

En esta existen varias estrellas, entre ellas, algunas muy parecidas a nuestro Sol, pero en diferentes etapas de vida. Esta zona de la que hablamos es llamada como Messier 57, también clasificada como NGC 6720, o Nebulosa del anillo.

Crédito de imagen: NASA

Esta nebulosa planetaria se encuentra ubicada en la constelación de Lira, y cabe aclarar, las nebulosas en realidad son la consecuencia de una estrella que ha terminado de quemar todo su combustible, lo cual provoca que, después de una serie de procesos físicos y químicos, las que una vez fueron las capas que rodeaban el núcleo se desprendan hacia el espacio en una estela de gas y polvo cósmico.

A su vez, en el centro de los restos de la estrella muerta queda un incandescente y caliente núcleo, el cual es llamado Enana blanca.

Esta enana blanca emite radiación ultravioleta, la cual es la que provoca que el gas que la rodea brille. Lo especial de Messier 57, es la forma que toma el gas que rodea la enana blanca, una forma de anillo.

Lo interesante del avistamiento a esta zona específica del universo, son los datos recabados por los expertos, los cuales aseguran que, al tener la vista en tan alta resolución de los últimos momentos de vida de una estrella, estamos presenciando a su vez el futuro lejano que le depara a nuestro Astro rey, el cual indiscutiblemente tendrá que llegar al final de su vida, tal y como sucede en Messier 57.

Aunque para que ese día llegue tendrá que haber pasado una gran cantidad de tiempo, en otras palabras, esta zona del universo puede ser observada continuamente para poder comprender como se forman y evolucionan las nebulosas planetarias.

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