La importante razón por la que no debes aplastar una chinche, te sorprenderá
Triatoma meccus comúnmente conocida como chinche hematófaga, créditos de imagen a La Jornada
Los insectos que forman parte de la fauna nociva son un dolor de cabeza para los hogares, pues además de su molesta presencia, pueden amenazar nuestra salud de diferentes maneras.
Por ejemplo, las cucarachas nos pueden enfermar al portar bacterias patógenas a nuestros alimentos, los mosquitos pueden transmitirnos virus como el dengue y chingukuya. Las chicnhes por su parte, aparte de alimentarse de nuestra sangre, pueden contagiarnos de enfermedades graves como la tripanosomiasis o enfermedad de Chagas.
Hoy te hablaremos sobre las chinches hematófagas o besuconas (que se alimentan de sangre) y por qué no es buena idea aplastarlas.
Chinches come sangre o chinches de cama
Las chinches hematófagas, también conocidas como chinches de cama, son insectos parásitos que se alimentan de sangre humana durante la noche. Estas chinches son una amenaza para la salud porque pueden transmitir enfermedades a los seres humanos, además de causar reacciones alérgicas y picaduras dolorosas.
Entre las enfermedades que pueden transmitir las chinches hematófagas se encuentran la enfermedad de Chagas, la fiebre Q y la hepatitis B. Aunque la probabilidad de que las chinches transmitan estas enfermedades es relativamente baja, es importante tener precaución y tomar medidas para prevenir su presencia en el hogar.
Además de transmitir enfermedades, las picaduras de chinches de cama pueden causar una serie de síntomas incómodos, como picazón, inflamación y dolor. Las personas que son alérgicas a las picaduras de insectos pueden experimentar una reacción alérgica grave que requiere atención médica de inmediato.
Es importante tomar medidas preventivas para evitar la presencia de chinches hematófagas en el hogar, como revisar regularmente la ropa de cama y la ropa en busca de signos de infestación, sellar grietas y hendiduras en las paredes y el piso, y evitar traer muebles usados a casa sin inspeccionarlos cuidadosamente. Si se sospecha de una infestación, es recomendable buscar la ayuda de un profesional en control de plagas.
Aplastar una chinche no es la mejor idea
Cuando vemos una chinche es normal que nos alarmemos y que queramos aplastarla con el primer objeto que encontremos, llámese zapato, tenis u otro artículo. Sin embargo, esta idea no es la mejor idea y la razón está en que si este insecto se ha alimentado previamente, dejará una horrible mancha en nuestro piso, pared o alfombra. Además de que puede exponer los parásitos que tenga en su interior y otros microorganismos dañinos. Sumado a esto se tiene que tomar en cuenta que, si no se limpia correctamente, podría dejar residuos que pueden ser alergénicos.
Otro factor para considerar es que su estructura o caparazón protector demasiado duro y rígido, lo que posiblemente podrá dificultar su total aniquilación.
Si encontraste una chinche en casa, es posible que haya más, así que te recomendamos solicitar una fumigación con profesionales que puedan controlar este tipo de fauna nociva.
Mantén la calma, recuerda que una mente tranquila razona mejor y podrás tomar decisiones pertinentes que no expongan tu salud ni la de tus familiares.