Estas son las características que te indicarán cuando el pollo del refrigerador ya se echó a perder
Aunque ciertamente la temperatura que mantiene el refrigerador permite conservar los alimentos perecederos sin que estos se echen a perder, es indispensable reconocer que este tratamiento solo enlentece la proliferación bacteriana, mas no la evita, por lo que eventualmente tales productos ya no serán seguros para su consumo y estos deben desecharse.
Por ello, es importante distinguir cuál es el tiempo máximo que podemos mantener cada producto perecedero en el refrigerador sin que estos se echen a perder, así como cuáles son las características que evidencian que un alimento ya no es seguro para su consumo, cuestiones que nos permitirán evitar una intoxicación alimentaria, producida por la ingestión de alimentos contaminados con microorganismos patógenos para el humano.
En este sentido, ambas circunstancias depende del tipo de alimento del que se trate, y el día de hoy te compartiremos esta información respecto al pollo, un producto que se consume ampliamente por toda la población, así que, sin más preámbulo, veamos todos los detalles a continuación y ¡toma nota!
¿Cuánto es el tiempo máximo que puedes mantener el pollo en refrigeración?
Las agencias alimentarias nos indican que el pollo crudo puede conservarse en el refrigerador de manera segura de uno a dos días como máximo, después de ese tiempo, si este alimento se mantiene a esa temperatura, es probable que las bacterias comiencen a proliferar y, por lo tanto, ya no sea seguro para su consumo.
Así que, si no cocinará el pollo después de uno o dos días de adquirirlo en el supermercado, lo mejor que puede hacer es congelarlo, pues de esta manera puede mantener el alimento seguro de manera indefinida, aunque se recomienda consumir antes de los 12 meses.
¿Cuáles son las características que indica que el pollo ya se echó a perder?
Si has mantenido el pollo en el refrigerador por más tiempo del que se considera seguro y no sabes si este ya se echó a perder, toma en cuenta estas características para garantizar que al consumirlo no te expones a una intoxicación alimentaria:
- El color de las carnes o aves de corral siempre es un factor importante que podrá indicarnos si el alimento está echado a perder, en este caso, cuando el pollo está en buen estado, su piel debe observarse blanquecina o amarilla, mientras que la carne debe ser rosada. Aunque toma en cuenta que esta característica por sí misma no es definitiva para determinar que el alimento está deteriorado, pues también deben presentarse las que enunciaremos a continuación.
- El olor es uno de los factores más determinante que podría indicarnos que el pollo está en mal estado, pues si este emite un olor desagradable, fuerte y amargo, es muy probable que ya este echado a perder.
- Junto con el olor, esta es una de las características a las que más debemos prestar atención para determinar si el pollo está echado a perder. De manera normal, la carne de pollo se observa tersa y firme, pero cuando existe proliferación bacteriana esta estará pegajosa al tacto e inusualmente viscosa.