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Hojas amarillas en las plantas de patatas: por qué salen y cómo evitarlas

La planta de papa es de especie herbácea, puede llegar a medir un metro de alto, y tiene origen en Perú.

Esta planta florece a mediados de primavera, y casi comenzando el verano. Dándonos así los famosos tubérculos que, si bien antes solo se le sembraba para dar vista o adornar alguna casa, ahora son sumamente empleados en nuestra cocina. Y es que realmente nunca puede faltar al menos una papa para cocinar.

Aparte de saber muy ricas, de acuerdo a Cuerpo y Mente, las papas/patatas también tienen propiedades nutritivas, aportando a nuestro cuerpo:

  • Vitaminas del grupo B
  • Potasio
  • Selenio
  • Hierro

Pero eso sí, debemos tener precaución con cómo las consumimos, puesto que sí lo hacemos a base de aceite, es decir, fritas, entonces estaremos cometiendo un grave error, puesto que no conservaran sus nutrientes y solo meteremos grasa en exceso a nuestro cuerpo.

Por lo cual, lo recomendable sería usarlas a vapor, evitando así deshacernos de sus propiedades y consumiéndolas adecuadamente.

A veces, comprar papas, resulta un tanto caro, por lo cual no hay nada mejor que poder plantarlas nosotros mismo, y aquí te diremos como cuidar de ese pequeño amigo que te dará muchas papas sin costo alguno.

Principalmente, debes saber que esta planta es de clima fresco, y que deberás cuidarla de muchas enfermedades, ya que son altamente propensas a que les caiga una plaga o cualquier otra enfermedad de planta. Según las indicaciones de la página de Agronomía, la situación debe de estar así:

  1. El suelo debe de estar perfectamente drenado, así como al aire libre, y sobre todo darles un buen espacio para poder desarrollarse. Son exigentes con el regado de agua, pero tampoco vayas a excederte o la ahogarás.
  2. Atención a las hojas, pues son color verde, pero pueden llegar a tornarse amarillentas mucho antes de que puedas llegar a tomar las papas. Y en cierta medida puede resultar normal, pero si notas que el amarillo se esparce tanto por la hoja como por el resto de la planta, entonces hay algo mal, y puede estar siendo afectada por:
  • Minadores, estos insectos son tan pequeños pero potentes, dañando en gran medida la hoja, poniendo sus larvas ahí y haciendo hoyos, matando así la hoja.
  • La infección «pierna negra», la ocasiona una bacteria bastante común en tubérculos, y para que tengas cuidado, esta se cuela a través del suelo, siendo la humedad un factor que beneficia a esta bacteria.
  • Exceso de agua y que el suelo no esté drenado, deja prácticamente sin oxígeno a través del suelo a tu plantita. Afectando de igual manera en su crecimiento.
  • Deficiencia de minerales, aquí deberás tener cuidado con los fertilizantes, ya que su exceso lleva a una deficiencia de magnesio, potasio y nitrógeno. Minerales esenciales para la vida de la planta.
  • Marchitez, ocurriendo por alguna infección como por Verticillium o Fusarium, provenientes de hongos ambos viviendo en el suelo, llegando a causar que la plantita no absorba el agua que necesita.

Para que podamos evitar la infección de “pierna negra” lo recomendable es que el suelo donde plantaremos esté muy bien drenado, con buenos minerales, evitando en cierta medida el calcio.

Por otra parte, si tu planta ya se infectó, sería bueno que la retirarás lo antes posible, de lo contrario, la infección o bacterias pueden quedar en el suelo, ocasionando que la siguiente planta que pongas ahí también se infecte.

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