¿Por qué los grillos ‘cantan’? Este es el significado de su peculiar melodía
A pesar de la reducción de hábitats naturales que existen, hay miles de formas de vida que comparten espacio con los humanos en las grandes ciudades.
Con el paso del tiempo, la sobrepoblación, la construcción de zonas urbanizadas, la explotación de recursos naturales y el cambio climático (afectando fuertemente a todas las formas de vida), los insectos han disminuido considerablemente sus poblaciones.
Sin embargo, en algunas épocas del año, podemos ver un mayor número de individuos, que muchas veces pueden sacar un susto si ingresan al hogar, pero, también nos alegran con su presencia, aleteos y sonidos.
Acampar con la familia, hace que convivamos con la naturaleza y extrañemos la presencia de estos insectos en los patios y jardines de nuestro hogar.
Uno de los animales que más se encontraban por doquier y nos deleitaba con su particular sonido, eran los grillos.
Los grillos son una familia de insectos ortópteros (que viene del griego ορθός u orthós, «recto, derecho», y de πτερον o pteron, que significa «alas»).
Son animales realmente curiosos y si alguna vez has tocado uno, sabes que cuentan con un cuerpo blando, tres pares de patas y uno de antenas. A grandes rasgos su cuerpo se puede dividir en cabeza, tórax y abdomen. Cuentan con un proceso de metamorfosis que puede ser sencillas o completas y son terrestres.
Estos increíbles animales cuentan con adaptaciones en su anatomía que les permite desplazarse rápidamente por el suelo, al igual que saltar.
Los grillos tienen una amplia distribución, por lo que podemos contar con su presencia en todos los ambientes y pueden considerarse aliados y controladores biológicos o nocivos para el ser humano y otros animales (dependiendo de la especie).
¿Alguna vez te has preguntado, por qué y cómo realizan ese particular ruido los grillos?
La respuesta tiene que ver con sus hábitos y un secreteo oculto, tras sus melodías. Los grillos gustan de realizar madrigueras en el suelo, llegando a formar galerías de hasta 50 centímetros.
Esta galería proveerá de refugio a los grillos, pero tiene otra función biológica importante, los machos elaboran estas madrigueras con el fin de atraer a las hembras y poder llevar a cabo su reproducción.
Pero una buena galería no es lo único que importará durante el cortejo y según Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), los machos son capaces de modular el tono de su canto que, entre más fuerte sea, habla de un individuo más atractivo para las hembras.
Este sonido es generado a través de la fricción al frotar sus alas, provocando vibraciones que se transforman en sonidos. Antes se creía que en cuanto más fuerte fuera el canto, más grande sería el grillo. Sin embargo, en dicho estudio, se observó que la geometría de sus alas es variable, una característica que les permite emitir sonidos desproporcionadamente altos y con una frecuencia variable.
Uno de los factores ambientales que afecta directamente el canto del grillo es la temperatura, cambiando la altura tonal de su sinfonía.
Debido a que los grillos son animales de sangre fría, la temperatura afecta su actividad. Esto quiere decir que cuando la temperatura aumenta, tienen mayor energía, emitiendo un canto fuerte y rápido, por la facilidad de movimiento en sus alas.
Las vibraciones producidas por el canto, ayuda a las hembras a dar con el macho óptimo para dejar descendencia. Así que, el canto emitido por estos pequeños animales tiene que ver con un patrón conductual de cortejo.