Cómo cuidar tus flores de cempasúchil: 4 trucos infalibles para que duren todo octubre y noviembre

La caída de las hojas en los árboles, los tonos rojizos y cafés que acompañan los paisajes, junto con los pronunciados vientos y disminución de la temperatura; anuncian que la penúltima estación del año ha comenzado.

Los primeros días al finalizar las fiestas patrias, con el otoño recién inaugurado, cierto aire nostálgico se siente en el ambiente; sí bien, las festividades no dan pauta para que esto se prolongue más allá de 2 semanas.

En cuanto inicia el mes de octubre, la decoración de calles y negocios llenan los espacios públicos de colores.

Aunque las próximas grandes festividades (motivo de las decoraciones), tienen lugar los días 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, la población, no limita los arreglos en torno a Halloween (tradición estadounidense adoptada en México) y día de muerto a esas fechas.

Un sinfín de eventos culturales también van de la mano en esta época y todo entorno al tradicional día de muertos.

Dentro de la cultura mexicana, el día de muerto se ha vuelto una de las tradiciones más importantes que tiene el país, atrayendo cada año a miles de turistas en esta gran fiesta, llena de colores, música, comida, alegría y en especial, típicas flores mexicanas para rendir tributo a la muerte de una manera muy peculiar.

Esta tradición se remonta a las civilizaciones mesoamericanas, quienes tenían rituales de acompañamiento tras la muerte de un ser querido; en conjunto con velas, altares y la distintiva flor de cempasúchil (Tagetes erecta).

El cempasúchil suele tener una variedad de colores, cambiando en tonalidades amarillentas y anaranjadas, son flores con un singular y agradable olor, los tallos pueden alcanzar un metro de altura y los botones oscilan entre los 5 y 8 centímetros, considerándolos, relativamente grandes.

Esta flor solo florece después de la temporada de lluvias, siendo Guanajuato, Hidalgo, Michoacán y el Estado de México, los estados con mejores condiciones para su producción.

La colocación de grandes altares con una serie de platillos típicos mexicanas, el famoso pan de muerto, fruta de temporada, alimentos y bebidas preferidas del difunto, velas, papel picado y la flor de cempasúchil, son fundamentales para cumplir con las creencias del pueblo mexicano.

El cempasúchil es una flor endémica de México, su nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl” que significa “veinte flores” o “varias flores”; considerada por los mexicas cómo un símbolo de vida y muerte.

De acuerdo a la tradición, se tienen que realizar senderos desde el camino principal hasta el altar colocado en el hogar, con la finalidad de guiar a los difuntos a las ofrendas y alumbrar su recorrido.

A pesar de lo colorida, aromática y hermosa que resulta esta tradición, puede representar un gasto económico que puede ir al alza.

De acuerdo a las características físicas que, de la planta, su turgencia (generada por el alto contenido de agua en hojas) y peso, pueden hacer que los botones se rompan o bien, se maltraten con facilidad.

Es por eso que te dejaremos una guía a seguir para que tus flores de cempasúchil duren todo octubre y noviembre, a continuación:

• Luz: Este es un factor importante a considerar para que nuestra planta se mantenga en óptimas condiciones. Si bien se puede tener en interiores, ya sea en ramo o maceta, lo recomendado es que le de la luz solar al menos durante 2 horas al día.
• Riego: El cempasúchil es una planta que demanda un alto consumo de agua. Si se encuentra en maceta, se debe procurar mantener el sustrato húmedo, evitando encharcamientos.
• Floreros: Sabemos que una presentación viable y más económica es comprar un ramo de esta planta, considerando la elección de recipiente cómo lo más importante en este paso. Recuerda que tiene que ser un florero espacioso que permita la expansión de los tallos y una alta capacidad para almacenar agua. Es importante colocar las flores en un lugar con suficiente luz solar y cambiar periódicamente el líquido, para evitar estancamientos.
• Composta: Por último, si tu cempasúchil se encuentra en una maceta, agradecerá los nutrientes que puedas facilitarle mediante una composta elaborada con restos de materia orgánica.