Así puedes elaborar tu propio fertilizante casero con solo UN ingrediente de cocina
Tener plantas dentro del hogar es una práctica muy común, tanto que hasta podría parecer sencilla, pero la realidad termina siendo otra. Cuidarlas de manera correcta, con algunas plantas, es más difícil de lo que parece, y nutrirlas no es cualquier cosa, por eso hoy traemos una opción sencilla, económica y muy eficiente.
Tener un jardín o huerto lleno de plantas no es cuestión de echarles solo agua, se trata de más que eso; darles la suficiente luz solar que necesitan, tener una tierra “limpia”, evitar que se llenen de plagas, regarlas cada que se necesita, agregar fertilizantes, y es precisamente en este último punto en el cual nos centraremos a lo largo de la nota.
Entendemos que todas las plantas necesitan cuidados diferentes, es decir, evidentemente, no vas a regar una planta de helecho con la misma frecuencia que riegas una suculenta, y así puede ser con muchas otras plantas más, hasta las que se plantan con la finalidad de cosechar alimentos.
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, los fertilizantes son << sustancias ricas en nutrientes que se utilizan para mejorar las características del suelo para un mayor desarrollo de los cultivos >>.
Existen fertilizantes de diferentes tipos, entre los cuales destacan los que están elaborados a base de químicos, que son buenos y los más usados, evidentemente, pero pueden resultar agresivos para ciertos cultivos, por lo cual, inclinarse por lo natural siempre será la mejor opción, aparte de ser una muy económica.
En esta ocasión te brindaremos un truco sumamente casero, que actuará como fertilizante y será de gran apoyo para tus plantas, y lo único que deberás tener a la mano es:
- Un aguacate
- Agua
- Rallador
- Una botella
Y para llevar a cabo el procedimiento solo necesitarás realizar los siguientes pasos de manera ordenada.

Primero que nada, no es necesario que agregues todo el aguacate, puedes tomar la mitad y el hueso, o bien solo el hueso de este, si no quieres desperdiciar así tu aguacate.
- Toma tu aguacate y quítale la cáscara (esta puedes triturarla para agregarla de igual manera a la mezcla o tirarla)
- Presta especial atención en el hueso del aguacate, este será el rey del truco, quítale el exceso de aguacate.
- Toma el rallador que te requerimos anteriormente y empieza a pasar por ahí la bola del aguacate, con mucho cuidado.
- Una vez termines de rallarlo juntarás lo que salió y lo agregarás a una botella.
- En la misma botella agregarás un litro de agua y cerrarás perfectamente.
- Cuando tengas mezclado todo irás a tu huerto y en la tierra empezarás a agregar la mezcla de poco a poco.
Este truco puedes agregarlo cada que les toque riego a tus plantas, pero eso sí, recuerda que no todas necesitan el mismo riesgo, así que presta mucha atención en esta parte para evitar dañarlas en lugar de beneficiarlas.