La razón por la que siempre debes colocar una taza de bicarbonato en el refrigerador

El refrigerador es uno de los electrodomésticos más básicos de cualquier cocina, pues este nos permite prolongar la vida útil de los alimentos perecederos al enlentecer la proliferación de microorganismos en su superficie, siendo ampliamente beneficioso para evitar el desperdicio de comida. Sin embargo, dado el uso que se le da, encontraremos muchas complicaciones en él, específicamente hablando de su limpieza, que a menudo puede provocar varios dolores de cabeza en las personas, ya sea porque no saben cómo hacer frente a estas situaciones o porque ya intentaron de todo y no logran contrarrestar esta problemática.

Dentro de todas estas, una de las complicaciones más destacables es el mal olor que con frecuencia se desprende del refrigerador cada que lo abrimos. Aunque ciertamente esta circunstancia es muy desagradable, debemos comprender que es algo que acontece de manera normal debido al uso que se le da, especialmente porque existen alimentos, ya sean guisos, salsas o frutos, que, aunque permanezcan en un recipiente, tienen un aroma tan penetrante que impregna todo el sitio y, además, al mezclase entre sí en el ambiente, se provoca un aroma aún más repulsivo.

De esta manera, en lo que respecta a este tipo de electrodoméstico, es necesario que se aplique un tratamiento para prevenir los desagradables aromas que los alimentos almacenados pueden provocar en él, para ello, una de las medidas preventivas más recomendables es colocar una taza (o recipiente similar) con bicarbonato de sodio en los estantes del refrigerador. Es muy probable que esta no sea la primera vez que escuchas esta sugerencia, pero si aún no la has puesto en práctica, este es el momento perfecto para hacerlo, pues esta es la forma más efectiva de hacer frente a esta molesta situación que siempre acontece en los refrigeradores.

Crédito de imagen: Luis Echeverri Urrea de Getty Images.

Como seguramente sabrán la mayoría de nuestros lectores, el bicarbonato de sodio se destaca, entre otras cuestiones, por tener la estructura perfecta como para fungir como un potente desodorizante, el cual, en lugar de camuflar o enmascaran los malos olores, como lo haría un aromatizante, lo que hace es absorber las partículas que provocan este desagradable problema y, al evitar que estas se mantengan en el ambiente, se elimina los repulsivos aromas provenientes de los alimentos que se resguardan en este aparato. De hecho, encontraremos presentaciones de este producto que especifican que es un desodorizante para refrigerador y congelador.

Sobre su aplicación, con la intención de garantizar la efectividad de este tratamiento y percibir los resultados de mejor manera, lo más recomendable es que antes de implementarlo realice una limpieza en el refrigerador y los recipientes que en el se resguardan, para posteriormente colocar una o dos tazas (o recipientes abiertos similares) en la parte de atrás de los estantes del aparato. Notarás que esto disminuirá de manera muy efectiva los malos olores, solo que recuerda que deberás cambiar el bicarbonato cada que notes que ya no está cumpliendo su función, pues llega un punto en donde este se satura.

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