El rover Perseverance tiene un misterioso compañero de viaje en Marte, y llevan juntos más de un año

El rover Perseverance tiene un misterioso compañero de viaje en Marte, y llevan juntos más de un año. (Imagen: NASA).

El año pasado compartimos un artículo donde mencionamos que el Rover Perseverance de la NASA había adoptado un inesperado compañero de viaje mientras buscaba signos de vida antigua. Sin embargo, no había muchas esperanzas de que durarían tanto, es más, en aquel entonces se mencionó que lo más seguro es que solo duren unos cuantos meses.

Resulta que hoy Perseverance todavía tiene a lo que popularmente se ha llamado “pet rock” o “roca mascota” en español. Como su mismo nombre lo indica, es una roca, atrapada en una de las ruedas del rover, la misma que viene recibiendo un aventón desde hace más de un año.

Tal y como se informó anteriormente, Perseverance recogió accidentalmente la roca mascota el 4 de febrero, o Sol 341 (día marciano). ¿Cómo eliges a un compañero?, pues a veces no tienes que elegirlo, pueda que este venga hacia ti; el rover no lo pidió, la roca simplemente se introdujo en la rueda delantera izquierda del rover y, desde entonces recorren juntos el planeta rojo.

Por si te lo preguntas, esto no presenta ninguna dificultad para la misión, al menos hasta el momento. La roca parece aferrarse a Perseverance, ya que ha soportado más de un año a pesar de que el terreno es accidentado, pero durante todo este tiempo el rover realizó sus actividades con total normalidad. De hecho, se han sumado otras dos autoestopistas al recorrido, y de igual manera no parecen representar algún problema.

“Quizá sepas que llevo una “piedra mascota” en la rueda delantera izquierda, que se me cayó ahí hace más de un año. Pero ¿sabías que otros también se han unido al viaje? He recogido dos autoestopistas más, en las ruedas delantera y trasera derechas. Me parece bien, ¡sigamos rodando!”, se lee en la cuenta del rover.

Algo curioso en esto es que la roca eventualmente caerá en un terreno que no es nada familiar. Es decir, dado que la geología y características del planeta varían, seguramente el lugar a donde vaya a parar sea muy distinto a la apariencia de la roca. Piénsalo, si fueses un geólogo planetario y te encuentras con una roca fuera de lugar, estarías algo confundido, entonces deberás considerar que probablemente se trate de una autoestopista que recibió un aventón de unos cuántos kilómetros.

“Así que: si eres un geólogo marciano del futuro que lee esto, tal vez un estudiante de posgrado marciano encargado de cartografiar el lugar histórico del cráter Jezero: presta atención. Si has encontrado una roca que parece fuera de lugar, ¡puede que estés ante la antigua roca mascota de Perseverance!”, escriben los funcionarios de la NASA.

No está demás en insistir que la NASA no ha reportado de que las rocas que acompañan al Perseverance de alguna manera afecten la misión, puede darse el caso, pero esta vez felizmente parecen tener una amistad sana. Además, la agencia espacial menciona que no es la primera vez que una roca se cuela en una misión de un rover en Marte. Hace unos 18 años, una roca del tamaño de una patata se coló en la rueda trasera derecha del rover Spirit y tuvo que ser desalojada. En el rover Curiosity, la rueda delantera derecha ha recogido periódicamente a su propio compañero de viaje.

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