El instrumento más frío de Webb alcanza la temperatura de funcionamiento ¡-266 °C!

El telescopio espacial James Webb observará las primeras galaxias que se formaron después del Big Bang, pero para ello sus instrumentos tienen que enfriarse primero, y mucho. La buena noticia es que ahora el instrumento más frío de Webb ha alcanzado una temperatura justo por encima del cero absoluto, la óptima para su funcionamiento.
La NASA anunció recientemente que el Instrumento del Infrarrojo Medio (MIRI) alcanzó su temperatura final de funcionamiento por debajo de 7 kelvins (menos 447 grados Fahrenheit, o menos 266 grados Celsius).
La baja temperatura es necesaria porque los cuatro instrumentos de Webb detectan la luz infrarroja, longitudes de onda ligeramente más largas que las que pueden ver los ojos humanos. Las galaxias lejanas, las estrellas ocultas en capullos de polvo y los planetas fuera de nuestro Sistema Solar emiten luz infrarroja. Pero también lo hacen otros objetos calientes, incluyendo el propio hardware electrónico y óptico de Webb. El enfriamiento de los detectores de los cuatro instrumentos y del hardware circundante suprime esas emisiones infrarrojas. MIRI detecta longitudes de onda infrarrojas más largas que los otros tres instrumentos, lo que significa que debe estar aún más frío, explica la Agencia Europea.
De acuerdo con el comunicado de la ESA, otra razón por la que los detectores de Webb deben estar fríos es para suprimir algo llamado corriente oscura, o corriente eléctrica creada por la vibración de los átomos en los propios detectores. La corriente oscura imita una señal real en los detectores, dando la falsa impresión de que han sido alcanzados por la luz de una fuente externa. Esas señales falsas pueden ahogar las señales reales que los astrónomos quieren encontrar. Dado que la temperatura es una medida de la velocidad a la que vibran los átomos en el detector, reducir la temperatura significa menos vibración, lo que a su vez significa menos corriente oscura.
¿Esto significa que el mayor telescopio espacial ya está listo para explorar el universo?
Recordemos que desde el inicio se informó que el proceso de alineación calibración tarda algo de 6 meses, así que las operaciones científicas podrían empezar a mediados de 2022. Otra pregunta que podría surgir es, ¿ahora qué sigue o qué falta para que esté listo?
Pues bien, a inicios de este mes la NASA informó que ha concluido la sexta fase de alineación de los espejos del telescopio espacial James Webb con sus instrumentos científicos, esto permitirá la captura de imágenes más precisas y enfocadas posibles. Y en ese entonces, el equipo estaba esperando el enfriamiento del instrumento de infrarrojo medio (MIRI) para dar el siguiente paso. Así que lo siguiente es la segunda alineación multiinstrumental para realizar los ajustes finales de los instrumentos y los espejos si fuera necesario.
Enséñame de Ciencia informó anteriormente que James Webb, una maravilla de la ingeniería de casi 10.000 millones de dólares actualmente es el principal observatorio de ciencia espacial del mundo. Se considera como el sucesor del legendario telescopio espacial Hubble, pero no un reemplazo, ya que las misiones serán complementarias mientras sus instrumentos continúen funcionando.
Se encuentra orbitando el punto 2 de Lagrange (L2), a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra en dirección contraria al Sol. Desde ahí resolverá los misterios de nuestro sistema solar, mirará más allá, a mundos lejanos alrededor de otras estrellas, e investigará las misteriosas estructuras y orígenes de nuestro universo y nuestro lugar en él.
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